
¿Como elegir los grados kelvin de una lampara?
Elegir el grado Kelvin (K) adecuado para una lámpara depende del ambiente que deseas crear y de la actividad que realizarás en ese espacio. Los grados Kelvin miden la temperatura del color de la luz, es decir, si la luz será más cálida (amarilla) o más fría (azulada).
Aquí te dejo un resumen de cómo elegir el Kelvin adecuado para diferentes situaciones:
1. Luz cálida (2.700K - 3.000K)
- Color: Amarillo suave, similar a la luz incandescente.
- Ambiente ideal: Ideal para crear un ambiente acogedor, relajante y cálido. Es perfecta para áreas como salas de estar, dormitorios o restaurantes.
- Usos comunes: Espacios donde se busca comodidad y relajación.
2. Luz neutra (3.500K - 4.100K)
- Color: Luz blanca cálida, no tan amarilla ni tan fría.
- Ambiente ideal: Buena para espacios de trabajo o áreas de paso. Ofrece un equilibrio entre claridad y confort visual.
- Usos comunes: Cocinas, baños, oficinas y pasillos. También es útil en lugares donde se necesita buena visibilidad sin ser demasiado fría.
3. Luz fría (5.000K - 6.500K)
- Color: Blanco con tonalidades azules.
- Ambiente ideal: Proporciona una luz más intensa y estimulante. Es adecuada para tareas que requieren concentración y alta visibilidad.
- Usos comunes: Oficinas, talleres, cocinas industriales, hospitales o cualquier espacio donde se necesite alta luminosidad y enfoque.
4. Luz ultra fría (> 6.500K)
- Color: Muy azulada, similar a la luz del día en un cielo despejado.
- Ambiente ideal: No suele ser común para ambientes domésticos, ya que puede resultar demasiado fría. Se usa más en entornos industriales o en iluminación especial donde se necesite luz intensa.
- Usos comunes: Iluminación técnica o de seguridad.
Recomendaciones generales:
- Para ambientes relajados: Elige luz cálida (2.700K - 3.000K).
- Para tareas que requieren concentración: Opta por luz neutra o fría (4.000K - 6.500K).
- Para cocinas y baños: La luz neutra o ligeramente fría es la mejor opción, ya que proporciona una buena visibilidad sin ser demasiado intensa.
- Considera la luz natural: Si tu espacio tiene buena iluminación natural, puedes optar por una luz más fría (5.000K - 6.500K) para mantener un ambiente luminoso.